BLANCPAIN
Inispiración vintage
Blancpain reinterpreta uno de sus modelos emblemáticos, el “Fifty Fathoms Bathyscaphe” de tres agujes, y viste su esfera con un color azul profundo que evoca los fondos marinos. Para completar su aspecto, el bisel de cerámica de plasma gris luce una inserción de cerámica azul e índices de Liquidmetal®- Esta aleación metálica evita las deformaciones. En cuanto a la caja, destaca la técnica de la cerámica de plasma gris. Este método de producción permite que el color luzca un matiz sutil de aspecto metálico. Cabe señalar que el plasma gris ya fue utilizado en el modelo “Bathyscaphe Chronographe Flyback Ocean Commitment” lanzado en 2014.
Los relojes de buceo Bathiscaphe de Blancpain vieron la luz a finales de la década de los cincuenta con modelos para hombre y mujer. En 2013, para conmemorar el aniversario del “Fifty Fathoms”, el “Bathyscaphe” lució una nueva estética que evocaba las primeras ediciones. Los contornos definidos recuerdan a los de sus antecesores. Las agujas también ofrecen la apariencia de los antiguos relojes, mientras que la fecha figura en una pequeña ventana entre las 4 y las 5 h. Fiel a la versión del “Bathyscaphe” original, en este modelo se distingue un índice luminiscente situado en el bisel, que mejora la legibilidad durante las inmersiones.
PROBADO RENDIMIENTO
Por otra parte, como sucede con todo reloj de buceo digno de este nombre, el “Fifty Fathoms Bathyscaphe” está dotado de un bisel unidireccional que se activa girándolo en el sentido contrario de las agujas del reloj mediante pequeñas muescas. Es hermético hasta aproximadamente 300 m, y durante la inmersión, el segundero hace las veces de indicador de funcionamiento.
Testigos del pasado, pero con la vista puesta en el futuro, los modelos de hoy están equipados con calibres Blancpain modernos, conocidos por su robustez y fiabilidad. El reloj “Fifty Fathoms Bathyscaphe” está dotado del famoso calibre 1315. Este se distingue por su robustez y por sus prestaciones cronométricas excepcionales. Sus tres barriletes montados en serie constituyen una auténtica proeza tecnológica y ofrecen al movimiento una autonomía de cinco días, al mismo tiempo que garantizan una energía constante. Este movimiento es visible gracias al fondo de cristal de zafiro, que permite admirar su aspecto, moderno y tecnológico.
Este calibre está dotado de una espiral de silicio. Recordemos que el silicio es un material particularmente ligero, resistente a los golpes e impasible ante los campos magnéticos. Gracias a sus propiedades, la espira se beneficia de una geometría casi perfecta que permite mejorar el isocronismo del movimiento y, por consiguiente, la precisión del reloj. Concebido como reloj deportivo, el calibre 1315 está provisto de un robusto volante de glucydur dotado de tornillos micrométricos de regulación de oro con cabezas cuadradas que garantizan una presión óptima y una gran eficacia de ajuste.