LOS RELOJES DE ESTILO VINTAGE, ES DECIR, AQUELLOS QUE REIVINDICAN MODELOS HISTÓRICOS O QUE REPRODUCEN FORMAS, RECURSOS Y ESTÉTICAS DE LA RELOJERÍA MÁS TRADICIONAL ESTÁN A LA ORDEN DEL DÍA. LA INDUSTRIA RELOJERA PROFUNDIZA EN SU LARGA HISTORIA, CONVIRTIENDO LA MAGIA DEL PASADO EN REALIDADES PALPABLES.

Desde hace algunos años y en todos los aspectos de la vida cotidiana, se aprecia un respetuoso, y a menudo incondicional, amor por lo retro, por los objetos antiguos y por todo aquello que en cualquier otro momento habríamos calificado de desfasado u obsoleto.

La nostalgia vende y lo hace prácticamente en todos los sectores. Así, el consumidor busca muebles de aspecto antiguo, que recuerden a los que imperaban en las décadas de 1950 y 1960 y que hicieron las delicias de sus padres y abuelos; y lo mismo sucede con los electrodomésticos, que ostentan formas suavemente redondeadas, tan alejadas en cierto modo del alto diseño contemporáneo. En el vestuario, las influencias son evidentes, pues al pasado recurren tanto los modistos que reinan en las pasarelas, como los ciudadanos de a pie, que arrasan rastrillos y tiendas de segunda mano. Incluso el mundo de la televisión se deja seducir por esta tendencia, y series como “Mad Men” o la más cercana “Cuéntame” registran grandes éxitos de audiencia.

EL GUSTO POR LO VINTAGE

Pero ¿por qué gustan tanto los artículos vintage? La respuesta sociológica habría que ir a buscarla en el momento histórico en el que nos encontramos y en la situación a la que están sometidos los consumidores, con la crisis y la inestabilidad como telones de fondo. Se cree que dichos consumidores, al refugiarse en el ayer buscan la seguridad de unos tiempos que se consideran mejores, recreándose en la añoranza de los paraísos perdidos.

Los coleccionistas y aficionados a la relojería siempre han apreciado el valor de lo antiguo, y la acumulación de piezas históricas ha sido y sigue siendo la clave de numerosas colecciones relojeras. Sin embargo, en la actualidad esta tendencia se ha visto notablemente intensificada.

El reclamo del pasado se aprecia también en los nuevos diseños. Las grandes marcas han revalorizado la fuerza de sus legados, por lo que recurren a menudo a sus propios archivos, recuperando modelos del pasado, piezas particularmente emblemáticas que marcaron en su momento un punto de inflexión. Las reeditan con leves modificaciones, tanto técnicas como estéticas, para adaptarlas a los nuevos usuarios.

En otras ocasiones, el carácter vintage es cuestión de inspiración, algo que se manifiesta a través de unos diseños que recuperan la más pura esencia de la relojería tradicional.

CLÁSICOS ETERNOS

A esta tendencia se suman modelos como el nuevo “Heritage 1957” de GIRARD-PERREGAUX, que ostenta un diseño inspirado en el icónico modelo de la década de 1960 “Gyromatic”, con movimiento de alta frecuencia. El 1957 despunta por su caja de cristal, esfera color champagne de efecto retro, agujas dauphine, material luminiscente e índices especiales llamados Girard-Perregaux heritage. El modelo 1957 está dotado de un fondo transparente que muestra el movimiento manufactura GP03300, con unos acabados tradicionales en la época de los 70.

CUERVO Y SOBRINOS se ha convertido en claro exponente del estilo vintage, una expresión seductora tanto en la forma como en su función gracias a sus raíces suizas y herencia latina. Con el “Historiador Clásico”, la firma propone un mayor refinamiento de su colección más emblemática.

Elegante y distinguido, el L.U.C XPS 1860 de CHOPARD es un homenaje al primer reloj de la colección L.U.C: el L.U.C 1860, lanzado hace 20 años con motivo de la creación de la Manufactura Chopard. Con su bonita esfera y su caja ultrafina, es una interpretación contemporánea de un gran clásico, equipado con los movimientos Chopard, los calibres 96.01-L y 96.03-L.

CON NOMBRE PROPIO

Por su parte, TAG HEUER, una firma especialmente orgullosa de su legado, celebra los 40 años del cronógrafo “Heuer Monza” con una preciosa reedición particularmente fiel al modelo original. En su época, era un reloj con mucha clase, diferente. Su caja con forma de cojín se inspiró en un modelo de 1925. Este cronógrafo completamente negro, estaba equipado con un pulsómetro (para medir el ritmo cardíaco), escala taquimétrica (que transforma un tiempo en velocidad) y agujas y contadores rojos en alusión al mundo de las carreras, tenía un diseño nuevo que contribuyó a forjar la historia que ahora conocemos. La reedición de 2016 recupera las dos funciones clave del reloj con el pulsómetro y la escala taquimétrica (ausentes en las anteriores reediciones), y con el mismo tipo de letra original.

Por su parte, LONGINES presenta el modelo “Heritage 1969”, que se inspira en un reloj creado a finales de los años sesenta. Con su caja de forma cojín y su esfera plateada cepillada, retoma los códigos del modelo original.

COLECCIONES MÍTICAS

Firmas como VACHERON CONSTANTIN reinventan una de sus colecciones más emblemáticas, en este caso la línea “Overseas”. Esta nueva generación de relojes automáticos inspirados en los viajes se concreta en cinco modelos nuevos (12 referencias), equipados con movimientos de la Manufactura (incluidos tres calibres nuevos), que irradian una elegancia informal cargada de practicidad.

Y la firma OFFICINE PANERAI satisface continuamente a sus seguidores lanzando ediciones especiales dedicadas a relojes históricos, como es el caso de los modelos “Radiomir” o “Luminor” “3 Days 1940 Acciaio”.

ELEGANCIA INMUTABLE

Los relojes de la colección “Classique” forman parte de los imprescindibles de la casa BREGUET. Su estética intemporal es una marca de fábrica de la que la relojería de prestigio no puede privarse. Los motivos que adornan los relojes “Classique”, por contemporáneos que sean, se inspiran en códigos decorativos que se utilizan desde los comienzos de la relojería.

PATEK PHILIPPE ha lanzado este año el reloj “Hora Universal”, referencia 5230, que sustituye al modelo conocido por los coleccionistas como “Worldtimer”, uno de los relojes más apreciados, desde hace cerca de ochenta años, de la manufactura ginebrina.

En cuanto a MONTBLANC, esta firma descubre con su línea “Heritage Chronométrie” el equilibrio perfecto entre herencia e innovación.

JAEGER-LECOULTRE conmemora el 85 aniversario del reloj “Reverso” con la colección “Reverso Classic”, que ensalza las características y marcada personalidad de este reloj mítico.

Por último, destacamos la línea “Cellini” de ROLEX, que celebra la elegancia eterna de los relojes tradicionales con un toque de modernidad, y la evocadora sencillez del “Slimline Automatic” de FRÉDÉRIQUE CONSTANT

Dic.05, 2016