Una de las normas de Bell & Ross es la de apartarse de la convencionalidad sin imponerse límites creativos. En ocasiones, la firma nos ofrece joyas tan exquisitas como su “BR 01 Tourbillon Skull”, que entronca directamente con la tradición histórica de los memento mori (recuerda que morirás), esa representación artística de la muerte que nos remite a la fugacidad de la vida. Bell & Ross, sin embargo, a través del gesto sonriente de su calavera, transforma el memento mori en un memento ridere.
En el año 2009, Bell & Ross presentó el “BR 01 Skull”, y en 2011 aparecieron dos nuevos modelos en edición limitada, uno de ellos el famoso “BR 01 Tourbillon Skull”. En 2015 la colección introdujo una caja de bronce, que adquiere una pátina especial con el paso del tiempo, haciendo de cada reloj una pieza única. En 2016, la firma innovó de nuevo con el concepto “BR 01 Burning Skull”, cuya caja grabada lucía una laca negra que recordaba la tinta de los tatuadores.
Este año, la gran novedad del reloj “Skull” es que incorpora el calibre de cuerda manual BR-CAL.206, desarrollado por Bell & Ross. Se trata de un movimiento autómata gracias al cual la mandíbula de la calavera cobra vida, como si dibujara una sonrisa sarcástica.

MOVIMIENTO DE MANUFACTURA
Al dar cuerda al calibre BR-CAL.206, 100% de manufactura, se activa la mandíbula de la calavera. Para lograrlo, la firma desarrolló un singular mecanismo, también con forma de calavera, que se adapta perfectamente a la caja “Skull”. En consonancia con los 4 huesos, 4 puentes fijan la platina a la caja. Ambos se ensamblan configurando un solo conjunto que parece flotar en el fondo del reloj.
En la esfera, la calavera constituye el elemento fundamental del reloj. Se ha realizado con aplicado metálico y estampado para que adquiera relieve. Este procedimiento se emplea habitualmente para acuñar monedas o para la realización de medallas. El esqueleteado otorga a primera vista la impresión de que el cráneo flota en ingravidez en el centro de la caja.

Oct.05, 2018