TAG HEUER

NUEVO CRONÓGRAFO CON CERTIFICADO

TAG Heuer cuenta con un nuevo cronógrafo que ostenta el prestigioso sello de excelencia «Tête de Vipère», otorgado por el Observatorio de Besançon. Desde 2006, únicamente 500 relojes han recibido este exclusivo certificado. Se trata del «Carrera Chronographe Tourbillon», editado en una edición limitada de 155 piezas.

En 1897 el Observatorio de Besançon estampó por primera vez el sello «Tête de Vipère» en un cronómetro. Prueba de la elevada calidad metrológica de un reloj, este emblema es un símbolo de excelencia y precisión inigualable. Abandonado en los años 70 y activado de nuevo en 2006, el sello «Tête de Vipère» se ha estampado desde entonces en tan solo 500 piezas. Para obtener este certificado de excelencia, cada reloj, una vez montado por completo, se somete a un protocolo de 16 días de prueba en cinco posiciones y a tres temperaturas distintas.
El Observatorio de Besançon, en nombre de la Oficina Internacional de Pesos y Medidas, es el único organismo público e independiente habilitado para revisar los cronómetros. Más que una prueba de calidad y precisión, este sello valida un savoir-faire técnico que raya la perfección. De hecho, el sello certifica el reloj en su conjunto y no solo el movimiento.
Por ello, hoy TagHeuer presenta una nueva versión muy moderna de su TagHeuer Carrera Chronograph Tourbillon con cronómetro, con un diseño contemporáneo y que cuenta con dos de las complicaciones más famosas de la relojería tradicional: un tourbillon y un cronógrafo. El movimiento va alojado en una magnífica caja de cerámica azul noche, adornada con un bisel y unas asas también de cerámica. En la masa y el cubo del movimiento pueden observarse elegantes detalles en azul. A modo de acabados se han utilizado el pulido, el cepillado y el pulido con chorro de arena para lograr un resultado elegante, moderno y acorde con la elevada calidad tecnológica de la relojería suiza. El sello «Tête de Vipère» se encuentra estampado en el puente y puede verse a través del cristal de zafiro del fondo de la caja.
El conjunto se completa con una fantástica correa de piel de aligátor negra cosida sobre caucho con pespuntes en azul que ofrece un aspecto deportivo y con clase, muy del estilo TAG Heuer.
Símbolo de tecnología, excelente nivel de calidad, de rendimiento y de savoir-faire de la manufactura y dominio total de los procesos industriales y de los costes de producción, el «TAG Heuer Carrera Chronographe Tourbillon Chronomètre «Tête de Vipère»» enriquece a la perfección el ADN y los códigos de TAG Heuer, a la vanguardia desde 1860.

 

Dic.04, 2018