El carbono es un material proveniente de la industria aeronáutica y de la Fórmula 1. De hecho, hoy en día es el material más común en la construcción de monoplazas, y su uso abarca desde el chasis hasta la carrocería completa. Esto se debe a que ofrece una excepcional relación entre resistencia y ligereza, además de tratarse de un compuesto relativamente fácil de trabajar. Una de las firmas pioneras en introducir este material en el sector relojero fue AUDEMARS PIGUET, cuando en el año 2007 presentó su “Royal Oak Offshore Alinghi Team”, el primer reloj comercializado fabricado en carbono forjado. 

Desde entonces las marcas han ido experimentando con este material de base, creando sus propias aleaciones. Estas son algunas de ellas.

CARBONO TPT®

RICHARD MILLE nos sorprende cada año con el desarrollo de un nuevo material de aspecto innovador y prestaciones únicas. Así sucede con el revolucionario carbono TPT®, con el que la casa da forma a la caja de algunos de los relojes de su colección. El carbono TPT® es un material exclusivo de aspecto visual singular, caracterizado por su grafismo ondulado y muy regular. Está compuesto por múltiples capas de filamentos paralelos, unos filamentos que se obtienen mediante la separación de hebras de carbono. El TPT® mejora un 25% las tensiones de ruptura y en un 200% las microfisuras en comparación con los compuestos habituales. 

El dominio del carbono TPT le ha permitido a la firma realizar creaciones tan espectaculares como su reciente colección “Bonbon”, en la que el diseño juega con las texturas y los colores. Por otra parte, entre los últimos experimentos realizados por la firma con este material, se encuentra el nuevo brazalete de carbono TPT presentado como primicia para el reloj “RM 07-01”. El brazalete está compuesto por decenas de pequeñas placas de carbono TPT® unidas a un esqueleto de titanio grado 5 mediante 44 tornillos Spline, característicos de Richard Mille. Esta creación micromecánica conjuga de forma sorprendente flexibilidad y rigidez extrema. La combinación de estos materiales permite que el peso total del brazalete sea de solo 29 gramos.

CMC

TAG HEUER empleó el CMC (Carbon Matrix Composite) para su reloj “Monaco V4 Phantom” en versión negro y mate (tanto su caja como los famosos 7 puentes de su célebre transmisión con microcorreas dentadas microscópicas). Se trata de una técnica especial empleada por la firma, que para la fabricación de elementos emplea carbono “orientado”, es decir, las fibras de carbono se orientan en el molde, y a continuación se pulen con chorro de arena para aportarles un cepillado vertical mate negro regular, que resulta especialmente elegante. 

Este año la firma ha lanzado tres relojes de edición limitada en carbono: el “TAG Heuer Carrera Carbon Tourbillon Phantom”, el “TAG Heuer Carrera Carbon en oro rosa” y el “TAG Heuer Carrera en rodio azul”.

CARBOTECH™

El Carbotech™, utilizado por OFFICINE PANERAI, es un material también derivado del carbono. Para formar las placas de Carbotech, se procede a la compresión de finas láminas de fibra de carbono a temperatura controlada y alta presión, junto a un polímero de alta calidad, PEEK (poliéter éter cetona), que aglutina el material compuesto y lo hace aún más resistente y duradero. Las fibras de carbono empleadas son muy largas, lo que asegura una gran uniformidad estética, y las láminas se superponen y prensan de manera que las fibras de cada capa se sitúan en ángulos distintos de los de las capas que tienen por encima y por debajo. Gracias a esta estructura, las propiedades mecánicas del Carbotech son muy superiores a las de otros materiales empleados en relojería, como la cerámica o el titanio: el Carbotech es más ligero que estos y mucho más resistente frente a presiones externas, además de ser hipoalergénico y a prueba de corrosión. 

Una de las novedades en Carbotech® presentadas este año es el “Panerai Submersible Carbotech™ – 42 mm”, equipado con el calibre automático OP XXXIV. Es sumergible hasta los 300 m y ofrece cálculo de tiempo de inmersión. 

CARBONO 3D

Es este un material ultraligero utilizado para la realización del “Big Bang MP-11” de HUBLOT. Es un compuesto de matriz de polímero con fibras tridimensionales. El brazalete también se ha realizado con el mismo material, por lo que todo el reloj pesa 90 g. Se trata de un material high tech utilizado por el ejército norteamericano, que ahora se emplea en el sector de la relojería. 

CARBONO SOSTENIBLE

Una propuesta particularmente interesante es la del Carbonium®, empleado por ULYSSE NARDIN para su “Colección X”. Se trata de un compuesto de fibras de carbono de calidad aeronáutica. Según la firma, es aproximadamente el doble de ligero que el aluminio y el doble de respetuoso con el medioambiente que los compuestos de fibra de carbono convencionales, ya que, a diferencia de la mayoría de compuestos, no se elabora con materiales vírgenes: el 95% del material se obtiene a través de métodos sostenibles de productos derivados del carbono en el ciclo aeronáutico. 

El innovador proceso empleado para reciclar la fibra de carbono se basa en tres patentes propiedad de Lavoisier Composites, una compañía emergente con sede en Francia. Se obtiene así un material compuesto de fibra de carbono elaborado a través de innovador rendimiento mecánico y con un impacto medioambiental mucho menor. 

El Carbonium® garantiza además un atractivo acabado estético. El proceso usado para obtenerlo requiere el uso de altas presiones y temperaturas, que revelan la belleza intrínseca del diseño orgánico creado por las fibras de carbono, lo que proporciona a los ingenieros de Ulysse Nardin una amplia paleta de combinaciones posibles con metales preciosos y pigmentos. El Carbonium® Gold, por ejemplo, es la «fusión» de filamentos de carbono de 7 μm y partículas de oro dispersas en una matriz termoendurecible, que crea un efecto de oro jaspeado de singularidad y delicadeza incomparables.

UNA ELEGANCIA MUY ESPECIAL

Dada la singular elegancia que aporta el carbono, son muchas las marcas que deciden utilizarlo para la creación de modelos especiales. Así, por ejemplo, BVLGARI ha presentado este año el “Octo Finissimo Tourbillon Automatic Carbon”, con caja de 42 mm de carbono extraplana (5,38 mm de grosor). Se acompaña de una pulsera también de carbono. Se trata de una edición limitada de 50 piezas. En el caso de Bvlgari, el nombre escogido para su aleación es CTP (Carbon Thin Ply), y presenta cualidades similares al empleado por Richard Mille. Destaca por el acabado de sus superficies negras veteadas. La firma ya empleó este material el pasado año para su “Octo Finissimo Minute Repeater”, y el compuesto aportó a la repetición de minutos del reloj un sonido muy especial y armonioso. 

En 2019 ZENITH se ha sumado a la creciente tendencia del uso de carbono en relojería con su nuevo “Defy El Primero 21 Carbono”, y ROGER DUBUIS ha hecho lo mismo con su “Excalibur One-Off”. La firma ha bautizado su carbono con el nombre de C-SMC, y en este caso lo combina con detalles de titanio rojo y con un bisel de carbono con marcadores de cerámica líquida.   

EN EL INTERIOR DEL CALIBRE

A inicios del año en curso, TAG HEUER abrió el camino a una próxima generación de relojes con tourbillon, y lo hizo gracias al uso del carbono. Su gran innovación radica en el hecho de que introduce una espiral de compuesto de carbono, producida a partir de un gas que sustituye a las conocidas versiones de Elinvar y silicio. Según la firma, la nueva espiral aportará las siguientes ventajas: por su baja densidad es virtualmente inmune a la gravedad y a los impactos; garantiza oscilaciones perfectamente concéntricas, lo que mejora considerablemente la precisión del reloj; es totalmente antimagnética; garantiza un comportamiento térmico y aeroelasticidad de óptima calidad. 

Jul.30, 2019