La tendencia Skull en relojería fue recuperada por Bell & Ross en 2009, con el lanzamiento del primer reloj de su colección Skull: el BR 01 SKULL.
Diez años después, el nuevo Cyber Skull confirma, una vez más, el lugar destacado que Bell & Ross ocupa dentro del diseño de relojes contemporáneo. El estilo facetado ultramoderno de este modelo vanguardista proyecta esta familia hacia el futuro.
Hoy, Bell & Ross presenta el último de la serie: el Cyber Skull Bronze. Este reloj adopta la apariencia del icónico Cyber Skull pero, esta vez, adornado con bronce. Esta aleación evoluciona con el tiempo, lo que hace que cada una de las 500 piezas de esta serie sea única por derecho propio.
En 2020, Bruno Belamich, Director Artístico de Bell & Ross, apasionado de las técnicas de vanguardia, imaginó el Cyber Skull, una versión ultramoderna y futurista del modelo.
Este reloj de personalidad compleja combina materiales de alta tecnología, como la cerámica y el cristal de zafiro, y un diseño vanguardista. También podemos reconocer que es un homenaje al origami, ese ancestral arte japonés del plegado. Por último, su caja esculpida recuerda al fuselaje anguloso de un avión furtivo, invisible a los radares.
Hoy, el nuevo Cyber Skull Bronze retoma la caja cuadrada con bordes afilados y esquinas biseladas del Cyber Skull en versión bronce. Este diseño único con esta calavera dorada aporta un aspecto muy roquero a este reloj, que podríamos imaginar fácilmente en la muñeca de una estrella del rock.
CALIBRE DE MANUFACTURA
Para este nuevo Cyber Skull Bronze, Bell & Ross ha desarrollado específicamente el calibre BR-CAL.210. Este movimiento es un mecanismo 100% manufactura. Su cuerda manual activa una pieza autómata. Al girar la corona, la mandíbula de la calavera cobra vida. La calavera parece hacer muecas. El Cyber Skull parece reírse en la cara de la muerte.
La familia Skull es el primer reloj Bell & Ross que incorpora una animación autómata. Estas piezas tienen su origen en los mecanismos aparecidos en Europa en el siglo XIV.
En el Cyber Skull Bronze, la calavera se inserta entre dos placas de cristal de zafiro, como si flotara en el centro de la caja.
El calibre BR-CAL.210, casi invisible, se oculta tras la calavera. Las placas y los puentes siguen la forma del cráneo y se prolongan bajo los cuatro fémures. Sólo quedan visibles algunas piezas técnicas interesantes, en particular, algunos engranajes o el volante. Este elemento, situado a las doce, simboliza el cerebro de este cráneo lleno de vida.