Baselworld, en su edición de 2015, ha vuelto a ser escaparate de excelencia, de precisión, de evolución de la industria; pero sobre todo, lo ha sido de actualidad, de cambio y, en gran medida, de futuro. El salón ha demostrado que la relojería es también reflejo de una sociedad, de una época y de una serie de comportamientos a los que responde y se adapta con eficacia. En nuestra revista le dedicamos un amplio reportaje.
Jun.02, 2015